Los platos típicos de la
zona están ligados a la caza, sobre todo
destacan las judías con liebre o con perdiz, la
carcamusa, las migas manchegas o el pisto. Por
otro lado encontramos dulces como los mantecados,
de manteca o aceite, y las tortas.
Esquivias
ha sido un lugar muy conocido a lo largo de la
historia por la elaboración de vino y aceite,
dos productos típicos que desde tiempos remotos
constituyen parte de nuestro patrimonio
gastronómico.
El vino esquiviano llegó a ser muy famoso, como prueba tenemos un Real Decreto de 1530 en el que se hace constar que el vino de Esquivias estaba reservado para la Casa Real, la Nobleza Española, y también para enfermos y parturientas con receta médica.
Nos consta que en la
mesa de Felipe II se servía vino de Esquivias,
sobre todo vino blanco e incluso es mencionado
por Cervantes en algunas de sus obras, como en
el prólogo de "Persiles y Segismunda", y en el "Coloquio
de los perros".
En nuestra localidad también se elaboran aceites
de gran calidad y raíces históricas, que han
sido distinguidos por la Junta de Castilla-La
Mancha con varios premios en los últimos años.
Tanto el aceite como el vino, moderadamente,
forman arte de la dieta mediterránea, sencilla y
tradicional, que tiene el atractivo de armonizar
el placer con la salud.